El 21 de diciembre comienza oficialmente el invierno, la época más fría del año. Con él, comienza también la temporada de ciertas carnes que son propias de estas fechas y que aquí os contamos para que podáis disfrutar de estas piezas en su mejor momento.
El invierno, aunque también el otoño, es la mejor época del año para disfrutar de asados y guisos elaborados con caza. La carne de codornices, perdices, liebres, jabalíes, ciervos y corzos cada vez está más presente entre los consumidores, y más en esta época del año, por su excelente sabor y características culinarias. Además, la codorniz, por ejemplo, es un alimento de gran valor nutricional y de poco aporte calórico. Por su escaso contenido en grasas y en hidratos de carbono es una carne magra con un fuerte aporte proteico.
Por otro lado, es estos meses de frío está teniendo lugar la campaña de bellota, por lo que los amantes de la carne ibérica de cerdo están de suerte, ya que se trata de la época en la que se puede obtener la carne más fresca y sabrosa. Desde el secreto, el lomo, la presa, la pluma, el solomillo, la panceta, las costillas, etc. hasta el jamón ibérico. Todas estas piezas de temporada estarán en su mejor momento para ser consumidas.
Y es que las carnes de temporada conservan todas sus propiedades nutricionales intactas y se mantiene su aporte de minerales, vitaminas y otros nutrientes esenciales al 100%. Así que, siempre debemos tratar de priorizar aquellas carnes de temporada que el comercio de proximidad nos ofrece.