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Te recomendamos tres carnes menos recurrentes en las barbacoas pero que son un acierto seguro hechas a la brasa

Llega el verano y eso significa que las carnes se convierten en uno de los ingredientes principales de nuestras cenas y comidas con familiares o amigos. Hacer una buena barbacoa es una solución muy socorrida para disfrutar de este productazo. Las hamburguesas, chuletas, chorizos o panceta triunfan en las brasas, pero hoy desde Educarne queremos proponerte otros cortes y tipos de carne muy interesantes que también puedes incluir en tu barbacoa si quieres sorprender y triunfar a la vez 😉

Conejo.

La carne de conejo esta catalogada en lo que se conoce como carnes blancas, que se caracterizan por su bajo aporte de grasa. En concreto la carne de conejo tiene un alto contenido en vitamina B12 y potasio. Siendo, además, una carne fácil de digerir. Es una carne blanda y rica en proteínas, perfecta para una barbacoa.

Pollo.

El pollo a la barbacoa gusta a todo el mundo, por lo que es ideal para preparar en reuniones en las que hay también niños. Además, el pollo a la brasa es una receta muy versátil, ideal para una dieta sana en la que se quiere controlar el consumo de grasas. Aporta, además, proteínas y minerales muy necesarios para la salud. Es importante que adereces bien este tipo de carne y procures vigilarla mientras está en el fuego, porque puedes correr el riesgo de que se seque en exceso.

Riñones de cordero

Sí, sí has leído bien… las brochetas de riñones son uno de los platos estrella de la casquería que puedes incluir en tu barbacoa si quieres conquistar a los paladares más exigentes y sorprender a tus comensales.  Entre las propiedades de este producto, podemos destacar que es fuente de vitaminas como la B12, E, D y C, así como Zinc, Calcio y Hierro.

¿Y para acompañar?

Puedes preparar cualquiera de estas carnes con unos pimientos asados o las clásicas patatas fritas, o también asadas ¡esto va por gustos!

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